La Trampa del Reloj...
Allí estaba en el desván bajo unas mantas roídas por los ratones, lo cogí y fue como si algo en él se despertara de su largo letargo.
Tardamos más de tres meses en acondicionar nuestro nuevo hogar, y por supuesto que ese reloj estaría presidiendo la sala principal.
Tardamos más de tres meses en acondicionar nuestro nuevo hogar, y por supuesto que ese reloj estaría presidiendo la sala principal.
Él fue mi compañero de esperas, muchas más de las que me hubiera gustado, allí sentada en la mecedora mirando como cada grano iba cayendo al otro lado.
Mi alegría era saber que cuando el último de ellos cayera por fin en la cerradura de la puerta entraría la llave de mi compañero, dando una voz potente diciendo:
¡Mujer, ya estoy en casa, que tenemos para cenar!
La vida transcurría en el hogar tranquilamente, los quehaceres de los dueños eran simples, ella sus labores y él las tareas del campo, el reloj ( yo) era el más fiel compañero de la dama, lo miraba y en sus fantasías pensaba que cada grano de arena sería el desierto donde tal vez un tuareg la llevaría al oasis más lejano para contarle una historia de las mil y una noches, así era feliz imaginando aventuras sentada en esa hamaca viendo pasar el tiempo en... la Trampa del Reloj
Campirela_
{266 palabras}
La arena de los ciclos es la mismaE infinita es la historia de la arena;Así, bajo tus dichas o tu pena,La invulnerable eternidad se abisma.
{ fragmento del poema de José Luis Forges, El reloj de Arena}
Conto/relato lindíssimo que me fascinou ler. Elogio o talento e a inspiração inserta no texto
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Cumprimentos cordiais.
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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Gracias Rycardo un besote grande.
EliminarQué serenidad da ver caer la arena del reloj, así como lo que me ha transmitido tu relato, mi niña. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarMil besitos con mucho cariño y feliz noche ❤️
Este debía ser tranquilo fuea sustos ajajja. Un beso y felices sueños.
EliminarMuy buena idea la de tu relato, un reloj de arena que ocupa un lugar tan importante en una familia, tal vez si me permites decirlo, no era necesario darle ese giro desde el reloj, sino solo seguir con la dueña en primera persona.
ResponderEliminarBesos dulces Campirela.
Te admito tu opinión, es constructiva y esta bien dicha. Creo que tienes razón, pero tal vez quise compartir ese entusiasmo con el reloj ya que él fue compañero indispensable de ella en sus horas de espera. Un besote grande, feliz jueves.
Eliminarpues precisamente hace un rato pensaba en una cosa que tengo que escribir, y pensaba hacer un cambio de persona, que no recuerdo haber hecho nunca, porque sorprende asi de pronto y te hace pensar al lector si no se ha perdido en algun punto del relato, pero si sirve pora fortalecer ,, ya veré
EliminarGracias por admitirla, siempre es de manera constructiva y nunca de otra forma y por supuesto es tu relato, el cómo lo escribes es elección tuya. Solo me tomé la libertad de dejarte esa acotación como lector. Gracias una vez más por permitírmelo.
EliminarUn beso dulce más Campirela.
Gracias siempre, si te digo la verdad Dulce no es que lo hiciera a propósito, yo creo que si tú no me lo dices ni me había dado cuenta, ya sabes una es despistada hasta decir basta ajjajaja, pero eso no quita que si empiezas a escribir en presente te vayas por las bravas ajjaja, toda la razón ya estaré mas atenta . un besazo.
EliminarY gaby tú escribe que ya seremos luego nosotros los que decidamos si te has portado bien ajajaj, seguro que si. Gracias a ti tan bien.
EliminarHay relojes que son herencia familiar, que pasan de unos a otros pero suelen ser de pesas, con sonido. Tu le has dado importancia a un reloj de arena porque eres capaz de eso y mucho mas. Abrazucos, buenas noches y sueña bonito
ResponderEliminarGracias por tus palabras, pero soñar es tan gratificante que te hace vivir mil y una aventuras. Un besito con todo cariño.
EliminarPara mí que era un reloj embrujado, cuya trampa residía en atrapar a la mujer y hacerla sonar con los Tuaregs y la lámpara de Aladino a partes iguales. Jajaja. Muy bueno tú relato y en especial, la inserción del fragmento de ese poema. Besos
ResponderEliminarGracias Myriam, soñar viendo caer los granitos de arena debe ser como estar en pleno desierto y que mejor que un hombre azul venga a tus sueños ajjja. Un besazo y feliz dia.
EliminarGenial relato lo que uno hace por pasar el tiempo. Te mando un beso.
ResponderEliminarY lo recogo a tiempo ajaj. Besotes.
EliminarLos relojes suelen quitarte el tiempo, yo quisiera detenerlo. El tiempo es una ilusión.el reloj cuenta para atrás. Te va quitando la vida, cuando tu crees que avanzas.
ResponderEliminarHasta que se detiene, no alcanzas a entender el tiempo.
Nunca se entiende el tiempo, él es la clave de la vida si pudiéramos llegar a controlarlo, controlaríamos nuestro existir.
EliminarCaer en la trampa del reloj, sometiéndose a la tiranía de su control dictatorial, termina por hacerle perder el sentido a la vida, transformándola en una tortura. Magistral el poema de Borges. Gracias por traerlo. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Neo, el reloj nos marca el tiempo y nosotros lo transformamos a nuestro antojo a veces en tranquilidad otras en obsesiones , pero no olvidemos que él marca nuestro destino. Un fuerte abrazo.
EliminarY a pesar de esa trampa. tu relato transite tranquilidad, rutina y un hogar con espacios disfrutados.
ResponderEliminarBesos.
Muy bien Noelia, eso era exactamente lo que quería transmitir, tranquilidad a la rutina y sencillez con una pizca de fantasía e ilusión. Un besote grande, feliz dia.
EliminarEs estupenda tu aportación, me encantó, y ese fragmento de Borges, exqusiito.
ResponderEliminarUn abrazo grande
A esas palabras solo puede decir que muchas gracias . Un fuerte abrazo y feliz jueves.
EliminarA las dos nos ha atrapado la trampa del tiempo... Pero el tuyo es más dulce y hogareño.. Muy bonito, con su puntilla en el poema de Borges
ResponderEliminarUn besote te dejo entre los granitos de arena, búscalo 😘
El poema de Borges es una pasada, me acore de su reloj de arena y aqui le hice un poquito de hueco .
EliminarUn besote grande, feliz tarde calurosa.
El tiempo es ese espacio que tenemos que llenar para no perderlo, incluso con la imaginación.
ResponderEliminarMuy buen relato. Abrazos.
Tú los has dicho, ese espacio que hay ente quehacer y trabajo hay que rellenarlo de la mejor manea posible y que mejor que imaginar algo que nos llene el corazón. Un fuerte abrazo y muy feliz tarde.
EliminarEra un simple marinero; uno del monton que formaba parte de una tripulación con rumbo a lo desconocido. Un mal augurio penetró a mis adentros con la infinitud del horizonte. "Algo te delata en la mirada" que no me gusta nada...me decía el contramaestre...La tripulación se forma en grupos; en sociedades secretas donde el filo de una navaja brillaba con la luna. Unos eran andaluces, otros vascos, otros extremeños. Me daban miedo sus conjuros de miradas. Un peligro inminente en el descanso, era como un stop para no visitar la bodega solo. Las ratas abundaban las reservas de alimentos y las reuniones mas oscuras, se daban en el rincón mas oscuro. A penas a tiempo, la trampa del reloj de arena marcaba el tiempo que debías de emplear cada vez que bajabas a la bodega. Luego alguien te registraba pues todo el mundo debía de comer lo mismo. Tres son multitud en la pequeña cocina. A veces el jefe de cocina me cocinaba la rata mas gorda que cazaba y yo la comía con el miedo a ser descubierto por el capitán. El jefe de cocina era un hombre híbrido. Tenía pechos de mujer y una malformación que se acercaba mas a un pene que a una vagina. Era hombre callado que aguantaba las burlas de los demás. No aclaré que oscurece cuando desde el palo mayor de la Nao, alguien grita tierra la vista. "Carilindo", que así le decían los marineros, me dijo que saltara al mar y me quedara en aquella tierra prometida porque entre toda esa gentuza, lo mas probables era encontrar la muerte.
ResponderEliminarCristobal Colón me invitó a dar el primer paso en tierra desconocida. La vegetación era abundante. Nos descubrieron unos hombrecillos de aspecto extraño: Eran indios. Nos miraban curiosos de nuestra indumentaria y yo, nada más poner los pies en la arena, corrí todo lo que pude para adentrarme en la espesa vegetación y hoy, 40 años más tarde, antes de morir de viejo con mi mujer e hijos, recuerdo aquella aventura. Los indios me pusieron Topanga y no miento si juro que los años mas felices de mi vida, están en estas tierras.
Gracias por dejar tu relato, que ya veo que has utilizado más de una frase, me ha gustado mucho y te mando un abrazo enorme.
Eliminarla arena de un reloj creo que es de las pocas cosas que si le dieran a elegir, entre ser libre o cautiva, elegiria cautiva.
ResponderEliminarbesooosss Campi
Fíjate ahora que lo dices, creo que seguiría quedándose dentro de su urna de cristal. Un beso Gaby.
EliminarLos relojes de arena me fascinan, tengo uno encima de la mesa donde escribo hace más de treinta años...después de leer tú relato, creo que lo voy a mirar de distinta forma.
ResponderEliminarLadrónes del tiempo, testigos mudos de nuestras vidas, el tuyo resultó ser un poco tirano.
Besos preciosa.
Las miradas y los hechos que nos podrecen los objetos, tienen que ver mucho con el trabajo que desempeñan. Gracias Lucia .
EliminarUn abrazo en esta tarde más que calurosa.
¡Hola Campirela!
ResponderEliminarQue precioso relato, a mi me ha encantado ese reloj de arena con su historia. El reloj es el infatigable y fiel compañero de fatigas que nos marca la rutina diaria.
Un abrazo!
Muchas gracias Yessy, el reloj es nuestro alegría y también nuestra desesperación, cuando vemos que las horas no pasan o al contrario pasan demasiado rápido. Si nos damos cuenta nuestra vida siempre están marcadas por un reloj.
EliminarUn fuerte abrazo y feliz tarde.
Uno de tus relatos más brillantes,sin duda, intimista,profundo más allá de la fantasía del mismo. Comparto la opinión de Albada, totalmente...
ResponderEliminarMuy muy hermoso, mucho talento el tuyo amiga!
BESO ENORME!
Bueno Luna, te compro un piso ajajajaj,Gracias cielo, relojes que nos acompañan en nuestro tiempo ellos nos dan con su tic, toc, esperanzas, añoranzas, penas , alegrías todo un conjunto de emociones que las trasformamos en sentimientos .
EliminarY yo te dejo un abrazo con todo mi cariño muakkkkkk
Adorei a publicação no geral!
ResponderEliminar.
Quando um olhar se sente perdido.
Beijos. Votos de uma boa noite
Muito obrigado, bons sonhos.
EliminarDos versiones de una misma historia y te ha quedado precioso. Besos.
ResponderEliminarMuchas gracias Moli, para que veamos que de una misma cosa hay mil versiones diferentes. eso es la grandeza de las palabras. Un besito y muy feliz semana.
EliminarEl reloj es el mejor contador de historias, como esta que tus nos has contado, Campirela.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Gracias Nani, como dice la cancion Reloj no marques las horas..Bonito bolero. Un besazo
EliminarLos sueños siempre buscan un soporte para hacerte saltar desde el trampolín aburrido de la vida.
ResponderEliminarBesos, Campi.
Así es, ellos muchas de las veces es el reflejo de lo que nos gustaría . Un besote y gracias por tu visita.
EliminarPor un momento creí que había perdido el hilo, hasta que leí nuevamente y es que cambiaste de protagonista.
ResponderEliminarEs de lo más relajante ver caer la arena, una bonita historia
Abrazo
Cambie de protagonista sin pensarlo es cierto, creo que el subconsciente o mi despiste me causo ese giro. Me alegro que el caer la arena sea relajante, la verdad que si la miras detenidamente puede llegar hasta hipnotizarte. Un beso y feiz fin de semana.
EliminarEl reloj esa tortura diaria que obligamente tenemos que mirar Campi. Asi en la historia de todos los tiempos mucho antes el reloj de sol, el de arena y los actuales ... pero siempre caemos en su trampa.
ResponderEliminarMira todo lo que me hiciste pensar con tu hermosa historia, asi como a ella se nos va la vida, me gusto ver las dos prespectivas de la dama y el reloj, muy creativa.
Muchos besos Campi que tengas un buen finde!!
Gracia cielo, el reloj nos marca las horas de nuestra vida en la tierra, él sin querer es nuestro compañero fiel.
EliminarEsta muy bien todo lo que se te ocurrio, has visto, cuando nos ponemos a pensar no hay quien nos pare jajajajaj.
Un besote grande y a seguir cuidándose mucho.
Que bello texto, me encantó me parecio muy suve y delicado
ResponderEliminarMuchísimas gracias María, los relojes van encadenados a nuestras vidas. Un beso
Eliminarinteresting story of beautiful clock....
ResponderEliminarthank you for sharing
Muchas gracias Rain, un beso.
EliminarHave a wonderful weekend
EliminarY para ti comiences una feliz semana. Besos.
EliminarHola bella Campi!!!Me sorprendiste con ese cambio alli, a mitad de relato, admito que me desorienté jajaj .. Cuanta imaginación siempre para adecuarte a todas las propuestas y salir airosa. Felicitaciones!! Y que tema..el tiempo ...que inexorablemente se va...y la forma en que cada uno lo percibe y tambien lo aprovecha( o no). Graciasssss tambien or cada paso por mis letras , por estar aqui en los blogs y allá, siempre con tu cariño ..GRACIASSSS... Ten un bello fin de semana.
ResponderEliminarGracias a ti Eli, por tus entradas llenas de emociones y frases alentadoras.
EliminarEl tiempo es una medida que es para todos las misma aunque no surge los mismo efectos jajaj.
Te mando un fuerte abrazo en una tarde super, super calurosa . ,muakiss.
Original relato, Campirela. Me encanta. Te felicito.
ResponderEliminarAbrazos
Las gracias a ti, por tu visita y dejar tu huella. Un fuerte abrazo.
EliminarSiempre me han gustado los relojes de arena, son hipnóticos *.* También me ha gustado mucho tu relato juevero. No creo que participe en esta convocatoria, pero os voy leyendo.
ResponderEliminarUn besazo y feliz fin de semana
Gracias Dafne, el tiempo es oro y a veces aunque queramos hacer algo no nos llega la vida ajjaja.
EliminarMuchas gracias cielo.
Un besazo y pasa un genial finde.
El reloj se convirtió en testigo de una rutina, satisfactoria para el matrimonio habitante de esta casa. Bien contado.
ResponderEliminarBesos.
Eso es, él fue el más fiel compañero de la dama. Un besote grande.
Eliminarun testigo fiel que ofrece su sacrificio grano a grano Un abrazo
ResponderEliminarBonita manera de verlo. Un abrazo Rodolfo .
EliminarHola amiga!!! Que genial relato 😍 los relojes se da bien para cualquier tipo de historias y ni hablar si imbolucramos el tiempo 😉
ResponderEliminarUn besote desde Plegarias en la Noche
Son objetos que dan muchas ideas para inventar algún tema. Un besote y muy feliz semana.
EliminarHola Campirela, muy linda historia, los relojes me encantan, yo tengo varios pues me encanta usar reloj cuando salgo y mas allá de usarlo, que los colores de sus mallas combinen con la cartera y el calzado, pero los relojes de arena me parecen fascinantes, guardan cierta magia creo, muy buena historia, un abrazo, PATRICIA F.
ResponderEliminarMuchas gracias Patricia,los relojes de arena es como dices, es como magia el ver caer grano a grano es relajante o a veces estresante según se mire.
EliminarUn abrazo y feliz semana.
Gosto dessas ideias, pegar uma palavra e contar uma história. Sabes fazer com maestria lindas histórias. A de hoje ficou muito linda e emocionante, gostei muito. Beijos ;) https://botecodasletras2.blogspot.com/
ResponderEliminarMuchas gracias Jeanne, feliz comienzo de semana.
EliminarHola Campi, dentro de su monotonía el reloj se convirtió en su fiel compañero de aventuras y fantasías, quien sabe si algún día se cumple y se presenta en su puerta un guapo Tuareg:), buen relato querida Campi.
ResponderEliminarBesos.
Jaaaaaa, me gusta eso de guapo Tuareg, hombres de azul. Muchas gracias preciosa. Un besazo grande.
EliminarHola, Campi. Ya llegué :-9
ResponderEliminarTu historia, como una simbiosis, como la vida en un reloj, cada grano de arena una vivencia, una historia, una realidad o una fantasía.
Me ha encantado, de veras.
Un beso bien gordo.
Ya llegaste y yo aquí con la vara detrás de la puerta ajajjaja.
EliminarGracias Mag, los relojes marcan nuestro tiempo, pero también nuestras aventuras, él puede ser el mejor aliado y el peor. Un besazo con cariño.
Un relato muy bonito que me recuerda que nunca hay que sacudir un reloj de arena, cada grano caerá a su tiempo, no hay que forzar nada, todo llega o se va a su tiempo.
ResponderEliminarBesos, Campi!
Borgo.
Muy bien dicho, todo ocurre cuando debe ocurrir, ni antes ni después.
EliminarEl tiempo y en este caso, cada grano de arena nos tiene reservado toda una historia de vivencias .
Un abrazo y feliz semana.
Precioso relato, no hay que forzar el paso del tiempo.
ResponderEliminarBesos Campi😘
El tiempo no pasa más rápido, tiene su medida al menos hasta ahora. Un beso para ti.
EliminarHola Campi,
ResponderEliminarQue bien se te da la fantasía !!!
y con un radio de 10 cms aproximadamente el segundero daría esos segundos en 1 minuto. De ahí que el tiempo es el que es como medida. Más es preferible no conocerlo y vivir el presente sin relojes y que pase el tiempo mientras la alegría pasa por casa.
Un abrazo y extraordinario relato. Feliz semana !!!
Hola Joaquin, gracias por tu presencia y por tus palabras.
ResponderEliminarAsi deberia ser que el tiempo no ocupara tanto tiempo en nuestra existencia , pero amigo es lo que hay . Un fuerte abrazo.
Precioso relato desde la perspectiva de ella y también del tiempo con el reloj como protagonista. El tiempo se le escapa soñando o quizá gracias a sus sueños vive más allá de la rutina que le envuelve.
ResponderEliminarMuy bueno! Felicidades, compañera.
Ese es el punto gracias a los sueños su vida era mucho más alegre y tiene esa razon por la que seguir con su monotonía, pero en su sueños se eleva a lo más alto . Un besazo
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