Había pasado todo el fin de semana metida en casa sin ánimos de salir a ningún lado, cuando de repente sonó mi móvil, me sorprendió de quien era la llamada pues mi querido doctor se dignaba hacerme una llamada fuera del trabajo … Cogí la llamada y solo escuchar su voz hizo que algo dentro de mí ardiera como una llama en plena efervescencia.
Hola, Adrián, ¿qué tal estas? Bien Alicia estás ocupada. No en este momento estoy en pleno relax,¡paso algo, no me asustes! que ha sucedido.
Me acaban de llamar del hospital que María ha tenido una recaída y ha entrado en parada cardíaca, me dirigo en este momento al hospital y pensé que te gustaría saberlo, sé que no tienes turno, siii_ le dije antes de dejarle terminar_ dame unos minutos, me pongo algo y salgo para el hospital nos vemos allí, gracias Adrián por avisarme, no sabes cuanto te lo agradezco, chao nos vemos allí.
Al cabo de media hora los dos estaban junto con María en su habitación 136, ella estaba inconsciente pues la habían sedado y se la veía relajada y feliz, con su carita tan dulce llena de sentimientos, era una sensación rara los tres allí juntos, hacía solo un mes que se conocían los tres y que lazos habían creado, los jóvenes se miraron y en los ojos de Alicia caían unas lágrimas que recorrían su rostro, Adrián la vio y con su mano recogió sus lágrimas, la miro y sin mediar una sola palabra se le acercó y la estrechó entre sus brazos, no sabría ella si era de amor o de compasión, lo que si sabía que aquel doctor empezaba a ser algo más para ella.
Al día siguiente, tomaron muestras de sangre y pidieron los resultados urgentes, pues las demás pruebas no eran satisfactorias, su leucemia estaba avanzando demasiado deprisa es como si ella quisiera partir algún lado y deseara irse ya.
Por orden del doctor le quitaron la sedación, necesitaba hablar con ella y saber que desearía que querría hacer en el momento de llegar su final, eso solo era lo que importaba ahora y que ella tuviera un final a su medida.
Alicia ya en su puesto de enfermera, dejó dicho al personal auxiliar que cuando se despertara la llamasen, quería ser la primera en ver esos ojos como el mar y ver su carita y escuchar su voz, ¿por qué sería? Nunca antes ningún paciente la había llenado de esa forma, ella era tan especial… eso solo ocurre cuando unas almas sin conocerse de nada les unen tantas cosas sin decir palabra.
En la habitación 136 allí estaba ella sentada sobre la cama mirándose al espejo, y en él se vio reflejada, vio pasar toda su vida en unos instantes.
Cuando era pequeña, sus veranos en el pueblo rodeada de sus abuelos y primos, que feliz fue, tenía que dar gracias por haber tenido una familia tan generosa y buena con ella, más tarde recordó su primer amor, en ese río donde aquel zagal de otra ciudad se quedó prendado de ella, ese verano fue cuando descubrió ese cosquilleo que todas sus amigas le decían y si era cierto es una bonita sensación, pero solo fue eso un amor de verano, ahora en ese momento recordó su gran amor, el que compartió su vida con él a su lado, era marido, amante, amigos, cómplices, todos ellos eran todo su mundo, que felices fuimos, hasta que él partió y la dejó en la más oscura soledad, pero sus recuerdos siempre estaban allí en su cabecita se alimentaba de ellos no quería que pasara más tiempo sin poder estar con él, en algún lugar la estaría esperando con su mejor sonrisa y sus brazos abiertos, debía comunicar su decisión a su médico y enfermera y debía ser ya no quería demorar más la espera.
Cuando vio entrar Alicia la sonrió y la dijo con su vocecilla ven hija acercarte, quiero hablar contigo y el doctorcito, al decir esto Alicia se echó una sonrisilla lo cual no pasó inadvertida para María, jjj ya sé que te gusta mucho.
¿Por qué dices eso María? Ah porque una ya sabe de amores y esas miradas no engañan nunca y si quieres un consejo de esta anciana te diré que aceptes si te invita, él le gustas y se ve un buen hombre ante todo y creo que tú no le haces ascos, a sí que Alicia no se lo pongas muy difícil, pero eso si hazte respetar y ya sabes a los hombres hay que darles una de cal y otra de arena jjjj, bueno y ya está bien quiero que llames al doctor Ruiz deseo hablar con los dos si fuera posible, bien ahora le busco usted mientras tanto descanse.
Al llegar al control pregunto donde se encontraba el doctor Ruiz, le comunicaron que acababa de dejar un mensaje que bajaba al laboratorio hacerse cargo personalmente de los resultados de María, gracias voy a su encuentro debo de hablar con él lo antes posible.
Se dirigía al laboratorio cuando lo vio salir de él, al verla allí puso cara de preocupación. ¡Qué es lo que sucede!, dijo alarmado, nada que no tenga solución, le dijo con una sonrisa, tratando de no preocuparle, dime ya tienes los resultados, sí y no me gustan nada, ya veo tu cara lo refleja y tú me querías por algo especial, si antes estado en su habitación y me dijo que quería vernos a los dos pues tenía algo que comunicarnos por eso baje a buscarte. bien pues no perdamos tiempo subimos, sí.
Ya entrando en el ascensor dio a la séptima planta, ella se quedó un poco absorta, doctor no vamos a la primera, no, quiero que veas algo antes de ir donde María, deseo que compartir una información que me acaba de llegar hoy mismo a mi correo, y quiero que me des tu opinión.
El despacho era coqueto no muy amplio, pero sí acogedor, entraron y al cerrar la puerta vio que tenía una foto en su escritorio de una mujer ella se quedó mirando y él al darse cuenta se giró y empezó hablarle de lo que había descubierto.
Mira todo este caso de María me lo he tomado como algo personal, no preguntes por qué nunca antes me había pasado con ningún otro paciente, pero hay algo que me dice que ella nos necesita,si yo también lo he pensado llevo ejerciendo tiempo y pacientes han pasado, pero nunca como María, es especial, hoy cuando hable con ella tenía algo en la mirada algo que no sé explicarte, pero dime que has descubierto, siéntate por favor.
Alicia, hoy llego un correo en el cual decía que una paciente de aquí de este hospital, donaba su cuerpo a la ciencia, y cuando lo vi me alegré, porque uno no deja de ser investigador, a la par que médico, y sabemos que un cuerpo es una pieza fundamental para seguir investigando, pero cuál fue mi sorpresa cuando vi que era el de María.
A mí no me extraña si quieres que te diga la verdad lo veía venir por cosas que hablamos m pero bueno no te parece buena la idea más bien diría que generosa, lo que es extraño que una mujer de su edad piense de esa forma, eso es lo que me descoloca verdaderamente es generosa, pero porque lo hará, bueno quizás eso tengamos que descubrirlo, ¿no te parece Adrián?, sí.
Vamos si quieres solo ers eso, ok, por cierto, Alicia la foto de mi escritorio es mi madre, una mujer también excepcional.
Ya estaban los tres en la 136, María los observaba con sus grandes ojos y ellos dos hablaban y hablaban, y ella solo observaba, al cabo de unos minutos el doctor le dijo ha entendido lo que le hemos dicho, ella solo lo miro una más y dijo si, solo quiero que mi vida lo que me quede de ella sea digna, no quiero sufrimientos ni largas esperas, no quiero reanimaciones y cuando todo termine quiero donar mi cuerpo si aún queda algo útil lo hagan dar a quien más lo necesite y si no hubiera nada que investiguen todo lo más para poder salvar vidas ese es mi deseo.
Bien, pero eso ya sabe que no solo es de palabra, tendrá usted testamento, si claro, eso lo tengo bien atado, pero quería que ustedes dos lo supieran y fueran testigo de ello porque han sido tan amables conmigo que deseaba compartirlo y una cosa más desearía, si díganos, bueno pues que no volváis a decirme más si lo he pensado bien y todo eso, quiero alegría en mi instancia aquí y verlos felices y nada de caras tristes mi vida ha sido feliz y quiero que sea así hasta el último aliento, vosotros sois mis mejores amigos deseo y espero tenerles junto a mí.
Pasaron unos días y cada tarde íbamos el doctor y yo a compartir sus charlas y risas, cada vez más agotada, pero siempre con su sonrisa es lo que me queda de ella aparte de sus consejos y sus fábulas que me contaba. María fue para mí un ángel esa persona que solo una vez te encuentras en la vida, pero que siempre te acompaña.
Hoy hace un mes desde que nos dejó, pero de alguna manera vive en nosotros, Adrián me ha invitado a salir esta noche y quiero ir, cuando me miro al espejo veo como si un hada me dijera ponte bella, seductora y no le dejes escapar estáis hechos el uno para el otro.
Así termina este relato, con mi paciente en busca de su amor eterno y con el mío a punto de comenzar, estoy enamorada de mi querido doctor y él de mí, gracias a ella fue que nos conocimos y gracias a ella hoy soy más feliz
FIN
Queridos amigos espero que les haya gustado este relato en tres partes, lo escribi hace tiempo y hoy fue el momentos de compartirlo con todos aquellos que han tenido la amabilidad de leerlo.Gracias siempre.
Campirela_
Pues sí a mí me gustó y mucho. Espero el próximo. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias Chelo, me alegro que lo hayas disfrutado. Un besazo y muy feliz noche.
EliminarHola Campi,
ResponderEliminarTienes un arte especial para la narrativa. De hecho lo demuestras con este final antológico. Voy a pasar con más frecuencia por acá, como hacía hace años.
Gracias por compartir estos capítulos y esperaré a los que vengan.
Un abrazo y feliz martes !!!
Me parece genial que nos visites eso si siempre que puedas y tengas tiempo serás bien recibido y ya sabes tu entra sin llamar. Un abrazo y gracias de corazón .
EliminarUm final em beleza. Fantástico!
ResponderEliminarTens talento para a narrativa Campi. Em cada capítulo foste consolidando a expressão literária, num estilo muito próprio, claro e seguro.
Te felicito! Venham outros relatos!
Um grande abraço!
Graciasssssssssss, lo importante es que hayáis pasado un lindo momento mientras leías eso lo principal. Un besote.
EliminarMuy bonito y además bien ideado y estructurado, a la vez que narrado. Una historia llena de ternura, de valentía y de amor. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarUn abrazo.
José raigas por tu comentario, lo valor mucho Un abrazo y sarcias siempre.
EliminarEs una hermosa historia de amor, de vida y muerte, pero una muerte natural, como todos quisiéramos que fuera la nuestra. Me has encantado por momentos y emocionado por otros, gracias por compartirlo.
ResponderEliminarmariaosa
Pues tu ya me has hecho feliz. Y escucharme bien ...espero otra entriega de tus cuentos. Un beso gracias amiga
EliminarUn relato muy a tu estilo.
ResponderEliminarSuponía que María iba a dejar una clase de legado. Pero no imaginaba que fuera su cuerpo para la ciencia. Para que el médico estudie y vaya perfeccionando su medicina, ayudando a lo demás. Algo sorprendente y con cierto sentido.
Y está claro que tan especial paciente ofició de celestina.
Besos.
Jaaa, sabes Demi, cuando me dices muy a tu estilo es como sentir algo muy bonito y eso me gusta y me agrada así pues que decirte . GRACIAS. Un beso amigo por tus análisis del relato que me encantan de verás que si.
EliminarEs lo que falta en el mundo, más generosidad con el prójimo, así como muestra la María de tu historia, la vida supone eso, vivir de la mejor manera posible a pesar de las dificultades, el mejor legado que podemos dejar es esa actitud de vida. Buen relato Campirela.
ResponderEliminarBesos dulces.
Así es amigo, ella tuvo una vida linda y que mejor que tener una muerte a su altura con dignidad, no todos la tienen y eso no debería ser así, pero que podemos hacer. Gracias Dulce, siempre es un placer leer los comentarios ellos son el alimento de la entrada y la enriquecen mucho más.Feliz noche y en esta ocasión toca repletos de generosidad.
EliminarGran lección la de María. El mundo podría muy distinto a como es.
ResponderEliminarMe ha encantado amiga Campi, un final precioso. Yo pensé un final, pero se cumplió parte de él nada más.
Te felicito por tan buen relato, ha sido un placer leerte.
Un gran abrazo.
Me encanta que hagáis vuestros propios finales, te imaginas, creo que si todos pusiéramos el final que deseáramos haríamos una historia diferente pero encantadora. Gracias Juan. Besos y feliz noche.
EliminarSeguro que sí me gusto. Fue bonito leerte.
ResponderEliminarGracias amiga, el placer es el mio que estés aquí. Un abrazo.
EliminarNo solo me ha gustado Campi... conseguiste removerme por dentro y aflorar alguna lágrima que otra,angeles como ella hay muy pocos en el mundo y María era un ángel con cuerpo de mujer!
ResponderEliminarUn besazo enorme y una feliz tarde amiga
Gracias cielo, los pocos que hay están con cada uno de nosotros, solo hay que estar atentos y los sentirás. Esas lágrimas que sean de alegría y nunca de tristeza. Un besote y te deseo una velada dulce y mágica.
EliminarMaravilloso Campirela.. Oye me encanta cuando Adrián le pregunta a Alicia si está ocupada, y ella le contesta que está en pleno relax.. !Ah.! Estar en pleno relax es estar ocupadísima, o a mí me lo parece..
ResponderEliminarUn abrazo..
ajajjajaja, un buen observador, ella le dice eso para tal vez hacerse la interesante...Mas bien creo que estaba pensando en él.
EliminarGracias amigo me alegra tu regreso ya vi tu entrada preciosas imagenes que nos dejaste. Un abrazo y muy feliz noche.
Qué bonito, gracias a ella, el amor surgió, un gran legado, su humanidad. El Corazón de Maria. Una lección de vida.
ResponderEliminarQué relato mas entrañable. Me ha llegado al alma.
Un aplauso y un beso enorme, mi Campi.
Pues con tus palabras me quedo y ellas son el ánimo para seguir contándoos pequeñas historias inventadas que nos alegran el alma como bien has dicho. Un besazo reina mora muakkk.
EliminarHola Campirela, me ha encantado. María tan dulce, el doctorcito y la enfermera humanitarios a rebosar. Qué suerte encontrarte así con sanitarios tan amables y cariñosos.
ResponderEliminarMaría una señora de los pies a la cabeza que dona su cuerpo a la ciencia para que investiguen si ninguno de sus órganos sirviera para donar y trasplantar a otras personas. Se juntaron tres personas sensibles y bondadosas. Me ha gustado mucho. Enhorabuena por estos escritos.
Abrazos
Las gracias siempre a vosotros porque si vuestros comentarios esto no seria lo mismo. Un besazo Isa y es cierto ojalá hubiera más personas como estos tres personajes.Feliz noche!!
EliminarUn final a la altura del relato!
ResponderEliminarqué belleza! Emocionante, y precioso!
Eres una reina del relato!
beso enorme!
Gracias mi Luna, tu que me quieres y eso se agradece y lo siento. Besos preciosa.
EliminarMe ha encantado esta historia tan hermosa. Desde que leí la primera parte estaba deseando ver como acababa. Desde luego María era un auténtico Ángel. Muy bonito, Campirela. Ya estoy esperando el siguiente, je, je.
ResponderEliminarBesos
Muchas garcais Rita, por leerla y comentar. En la vida hay personas como ella y es lo que da sentido a las cosas. Un fuerte abrazo con todo cariño .
EliminarFoi uma estória muito emotiva e linda!:)
ResponderEliminar.
A ousadia dos sonhos...
.
Beijos, e uma boa noite! :)
Gracias, espero que te haya gustado. Un besote grande.
EliminarWoW!!! es fenomenal, que manera mas bonita de enlazar las palabras, los momentos, casi se puede visualizar y eso que no nos has entretenido con descripciones, ese es el merito de escribir directo y llegar. Un abrazo enorme
ResponderEliminarBueno ante tu comentario yo solo tengo que decir GRACIAS, y si te ha llegado eso quiere decir que tu sensibilidad la tienes a flor de piel y eso me gusta. Un besazo Ester,y que tus sueños sean lindos y mañana nos deleites con tus entradas que nos amenizan el café. Un besazo y abrazucos y saltos y de to ajaja.
EliminarSabes... Mereció la espera y mucho.
ResponderEliminarBonito! precioso!
Y un gra👏👏👏👏👏👏👏
Y🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹
Por compartirlo.
Un abrazo.
Que bueno , gracias Agapxis, las historias de amor y ternura siempre tendrá su sitio para los lectores.
EliminarUn fuerte abrazo y muy feliz noche.
Nada pasa por casualidad, mi niña... gracias por compartir tu relato, por haberlo sacado justo en este momento. Me ha encantado.
ResponderEliminarMil besitos con cariño para ti y muy feliz noche ♥
Gracias a ti, tal vez nos haya enseñado que las personas nunca se van del todo, ellas se quedan con nosotros y son nuestros ángeles, y tal vez podamos reunirnos con aquellos que en nuestra vida nos dieron su amor.
EliminarUn beso con cariño y ternura en especial para Ti Ana,
Feliz noche.
Qué pena que ya termine, una historia preciosa. Me quedo con ganas de saber más de la vida de María pero bueno, ella es como la vida, un misterio. Tu relato es como un cuento moderno, en muchos aspectos muy real; yo tengo dos "Marías" en mi vida, que se fueron bastante más joven pero que fueron, como ella, ángeles en nuestras vidas. Lo lindo además es que se fueron pero me pasa como Alicia, de alguna manera, siguen viviendo en nuestros corazones, siguen inspirándonos con sus vidas. Luego además tu relato me ha gustado doblemente porque toca otro tema bajo mi entender bastante peliagudo: el de la soledad en la vejez y la enfermedad. Me has reconfortado. Ojalá que un futuro, si alguna vez nos viéramos en una situación como la de María encontremos tan buenas personas como Alicia y Adrián. Me has aumentado la esperanza, así que muchas gracias. Y cuarto, y ya acabo, me has sorprendido además porque nos has llevado por derroteros al final que la mente no esperaba. ¡Bravo Campirela! Besos
ResponderEliminarBravo a ti por ser tan amable y me alegro de leer todo lo que pones, Seguro que hay muchos más Alicias. La soledad en la vejez es lo peor que le puede psaar al ser humano y más cuando es impuesta, porque en todas las etapas de la vida necesitamos cario pero en esta especialmente. Me da pena ver a personas de una avanzada edad que se sienten enfermas de soledad, porque no olvidemos algo, una caricia y unas palabras amables hace mas que un paracetamol. Gracias Ester, la vida es muy linda y en ellas estamos nosotros que la podemos hacer mucho más. Un besazo y muy feliz noche.
EliminarEl punto tercero me lo comí ;- ))) me has tenido intrigada, e intrigada me quedo con María, (disculpa la extensión) feliz semana, muak!!!
ResponderEliminarJaaaa, como que te disculpo mañana quiero un folio entero ajajja. Besos muakiss.
EliminarMe encanta tu espacio. Gracias por visitarme
ResponderEliminarSaludos.
Gracias a ti, un beso te llevas de regalo.
Eliminardonar el cuerpo para la investigación, el final perfecto para una mujer como maría, que por lo que traslucía, miraba más por los demás que por ella misma. he tenido la suerte de conocer a personas que, a pesar de su enfermedad, mantuvieron el buen ánimo hasta el final...
ResponderEliminaralicia hizo muy bien en seguir el consejo de maría. las personas mayores son muy sabias, ven cosas que otras personas con menos experiencia de la vida no ven.
un relato muy optimista y esperanzador. besotes!!
Gracias Chema, los mayores son nuestros maestros y de ellos debemos aprender mucho. La experiencia como se dice es un grado. Hay personas como estos personajes de ficción y con ellos me quedo. Un beso amigo . A dormir que ya es hora jaja.
EliminarUna historia maravillosa,, hay seres que pasan por nuestra vida dejando huellas profundas. Maria, una mujer especial, de las cuales pocas hay. Me encanto amiga. Saludos y abrazo.
ResponderEliminarEso es las personas dejan todas huellas pero las hay que son especiales. Gracias Sandra te deseo un feliz día. Besos y abrazos.
EliminarUn relato muy hermoso. Lo importante es que esas personas sigan vivas en nuestros corazones. Eso es la gratitud, que es la memoria del corazón.
ResponderEliminarBesos, Campi!
Borgo.
Y cierto es las palabras que has dejado reflejadas. La gratitud es algo que todos debemos guardar en nuestro corazón al igual que saberlo darlo a los demás. Un abrazo y besote Borgo.
Eliminar