martes, 4 de noviembre de 2025

Convocatoria del jueves 6 de noviembre. Un cambio radical

                      Pinchar en la imagen, os llevará a la convocatoria. Gracias.

UN CAMBIO RADICAL EN TU VIDA

 Se trata de escribir un relato de ficción o no ficción que trate sobre un cambio radical en la vida del o los protagonistas, que haya llevado a situaciones de final feliz, absurdas, con moraleja, caóticas, en fin… el desenlace queda a vuestro criterio o puede ser lo que ocurrió en la realidad. Lo que importa es basarse en un cambio que signifique un antes y un después en la vida de alguien.

 Marcos nos deja este reto, para el jueves, veremos a ver si damos un cambio radical, que sea digno de leer. 

Las cinco vidas de Alicia

A una edad, Alicia se hartó. No del mundo, sino de esa vocecita que le decía “ya es tarde”. Había sido madre, esposa, cuidadora, cocinera, consejera, y hasta árbitro en peleas familiares. Pero nunca fue lo que soñó, médica, bailarina, chef, viajera, o simplemente una señora que se quedaba en bata viendo series sin culpa.

Así que hizo lo que cualquier persona sensata haría en su situación, se apuntó a un experimento secreto de clonación. “Cinco versiones de mí misma”, dijo. “Cada una que se encargue de una vida que dejé en pausa.”

Y así nacieron:

Alicia 1, la médica, que se metió a estudiar anatomía con más entusiasmo que memoria. Diagnosticaba con pasión, aunque confundía el hígado con el páncreas. Pero nadie le quitaba la bata ni el orgullo.

Alicia 2, la bailarina, que se apuntó a flamenco, tango y breakdance. Tenía más torceduras que pasos correctos, pero bailaba como si el suelo le debiera algo.

Alicia 3, la chef, que convirtió su cocina en un laboratorio. Inventó la tortilla de chocolate y el gazpacho con menta. No todo era comestible, pero todo era inolvidable.

Alicia 4, la viajera, que se fue con una mochila y una brújula rota. Visitó países que ni sabía pronunciar, se perdió en tres continentes y aprendió a decir “¿Dónde está el baño?” En 14 idiomas.

Alicia 5, la de bata y sofá, que se dedicó a ver series, comer galletas y suspirar sin remordimientos. Era la más feliz de todas, y la más sabia.

Un año después, las cinco Alicias, se reunieron. Se miraron, se abrazaron, se rieron. Cada una había vivido lo suyo, con errores, con aciertos, con caídas y con gloria.

Y entonces, la original —la Alicia Ia de siempre— dijo:

“Ahora sí. Ya viví todo lo que quería. Y lo mejor es que no tuve que elegir.”

Moraleja:

A veces, no se trata de hacer todo. Se trata de darte permiso para imaginar que podrías. Y en esa imaginación, ya empieza el cambio.

Campirela_


14 comentarios:

  1. Un racconto brillante e ironico che celebra i sogni rimasti sospesi, mostrando come l’immaginazione possa trasformarsi in libertà e compiutezza interiore senza bisogno di reali scelte.
    Buon martedì, cara Campirela

    ResponderEliminar
  2. Pues sí, y sobre todo se trata de hacer lo que a uno le salga desde dentro. Buen relato.
    SAludos.

    ResponderEliminar
  3. Imaginando ya empieza el cambio. Original tu relato.
    Espero que tengas un buen día, Campirela.
    Hay una nueva entrada de mariposas también en mi blog.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Hola Campirela. Un relato original tus 5 Vidas de Alicia con una moraleja preciosa y sencilla: a veces el cambio empieza solo con permitirte soñar que podrías ser distinto. No siempre se trata de hacerlo todo, sino de abrir espacio para la posibilidad. En tiempos en los que parece que siempre llegamos tarde a algo, esta historia me recuerda que la imaginación también cuenta como un acto de vida. Gracias por señalar algo que tantas veces se nos olvida. Un beso

    ResponderEliminar
  5. Soñar y realizar esos sueños en alguna medida, que no siempre los sueños se cumplen. Aunque con cinco clones se abarca más y crecen las posibilidades :)

    Besos dulces, Campirela.

    ResponderEliminar
  6. Qué original tu relato, Campirela, yo también haría lo mismo jajaja así no te quedas en la vida sin hacer nada. Me gusta la 4, la viajera, esa sí que disfrutó viajando, perdiéndose en los tres continentes aunque solo supiera decir dónde está el baño jajaja.Ya me gustaría a mí.

    Y muy buena la moraleja. A veces con soñarlo ya lo estás viviendo, es verdad.

    Me ha encantado tu relato, mi Campi, un placer leerte.

    Que estés pasando una feliz tarde.

    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
  7. ¿Dónde está el baño? Esa puede ser una frase importante de aprender.
    Creo que la Alicia 5 fue la que más consiguió lo que la original imaginaba.
    Besos.

    ResponderEliminar
  8. ¡¡Que buen cuento Campi....!!
    Me encantó. Yo quiero ser la dueña de una casa de alta costura y que mis creaciones viajen por todo el mundo. Me hiciste soñar a mí también. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que lindo lo que expones, pues sé esa dueña de alta costura , aunque solo sea en tus pensamientos.
      Un besote grande.

      Eliminar
  9. Qué buen relato,y qué gran mensaje...
    Yo creo que todas somos muchas Alicias, Alejandras, Angeles... Y de vez en cuando es tan precioso recordarlas, sacarlas a pasear y sentirlas...
    Somos todas,somos una!
    Precioso!!!
    Un besote

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Has dado en el clavo , dentro de una mujer hay muchas, solo es el momento y lugar , donde cada una de ellas se revela a esa presencia. Un besote con todo cariño

      Eliminar
  10. story with great imagination.... love it.
    Have a nice day.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Thank you for visiting and commenting.
      Best regards.

      Eliminar

Gracias, por su visita y respeto hacia el blog, tengan un excelente día.