Hola amigos , me gustaría escribir un cuento sobre la marcha y que fuera todo fantasía pero por qué no realidad... en mi mente imagino un mundo más equitativo , donde todos los seres que poblamos esta tierra seamos alguna vez en nuestras vidas felices , pero no la felicidad que conocemos o creemos conocer, no la felicidad plena, esa que no se necesita nada para sentirse a gusto con uno mismo.
Ese día llegó cuando caminaba por la calle , en una décima de segundo pase a otro plano, mejor dicho a otra dimensión en ella solo veía montañas, ríos ,árboles , sobre todo una paz y un silencio sellado por el canto de las aves que por encima de mi cabeza volaban y al hacerlo sentía la linda brisa que me contagiaba de tal energía que mis brazos parecían alas , las cuales al abrirlos mis pies ascendían unos cuantos centímetros de la tierra.
Al observar lo que me deparaba mi destino , mis pupilas se dilataban y cada vez esa luz natural entraba a través de mi retina y veía los mas bellos colores que pude imaginar.
Mi nariz no daba crédito , al aroma que puede respirar , era una mezcla entre jazmín y azahar, ohhhh eso era el mejor perfume que jamás pude oler, por momentos estaba entrando en algo mágico , pues todos mis sentidos los tenía muy vivos , no daba a basto a tanto placer , la vista , el oído y el olfato.
Pero me esperaba lo mejor de aquel viaje fantástico , caminando por la orilla del río asomaba entre los grandes árboles un peral, lo conocí a primera vista , pues ya en mi niñez los había visto en el lugar que me críe , pero ese era algo diferente, sus hojas brillaban con la luz del sol, y de ellas colgaban las peras con algo de magia , pues cada una de ellas un nombre llevaba , al acercarme quede obnubilada, pues una vocecita , salía de aquella fruta , y me decía :
" "Hola amiga , como se que tienes sed , tómame y comela, verás que bien te sentirás "
Mi cara debía ser un gran poema , pues pensé " esto no puede ser" pero en el mundo de los cuentos todo puede ocurrir , así pues que cogiendo una hermosa pera la lleve a mi boca y os puedo asegurar que ni el mejor manjar sabía mejor que aquel frutal.
Ya solo me quedaba el tacto , pues en mi viaje ya había experimentado casi todos los sentidos ... se estaba acercando el ocaso , cuando de repente ante mi , un duendecillo me asalto.. diciéndome , por favor , me quieres coger entre tus brazos y acercarme hasta la otra orilla del río .
Quedé algo parada , pues no estoy acostumbrada a que haya duendes en mi vida , pero este no se por qué me daba confianza , poniéndome a su altura " he de decir que era muy chiquito" le dije:
Primero me tendrás que decir cual es tú nombre y porque razón debo de cruzarte el río.
Poniendo cara de circunstancias me miro fijo a los ojos , y con una suave voz , me traslado su mejor sonido.
Me llamo Amáis , y llevo en este bosque cientos de años , y siempre estoy en el camino vigilando quien viene para poder pedirle que me cruze al otro lado .
Vaya , vaya , así que el duendecillo nos ha salido caprichoso.. noo, se apresuro a contestarme , no me has escuchado nada de lo que te he dicho.
Perdona , quizás no he sido amable ante tu suplica , pero no hace falta que me digas más con mucho gusto te cruzaré .
Abriendo mis brazos le acogí tiernamente, era como una pluma , y suave como la seda , agarrado a mi cuello salimos al camino y cuando estábamos en medio del río me cogió con su manita la cara y me dijo:
Pues parar un momento , claro le conteste, solo quería que contigo en brazos observar el horizonte al ser tan pequeño solo veo una parte del camino y aquí contigo es todo tan distinto .
Aquellas palabras me hicieron sentir por un momento mejor persona , pues algo tan sencillo había logrado con ello hacer feliz a un ser diminuto que llevaba mucho tiempo esperando ver otro lado del mundo.
Al llegar a la otra orilla , le baje y me senté en una gran piedra , con él en mi regazo , estuvimos horas hablando me contó su historia y yo la mía , había transcurrido una linda jornada y el cuento llegaba a su fin , y para que todo fuese mágico , quede dormida atrapada a él .
Sonó el despertador , alargue la mano y me encontraba en mi cama , con mi muñeca agarrada , aquel sueño o cuento , no sabría distinguir me hizo la mar de feliz.
Campirela_