La Navidad que casi no sucede
Estas fiestas te invitamos a participar en una nueva edición de relatos navideños de los jueves con un tema lleno de encanto, humor y pequeños desastres cotidianos “La Navidad que casi no sucede”.
Queremos historias donde algo —o todo— se complica:
Una cena que se retrasa por un imprevisto.
Un viaje que se tuerce en el último momento
Un regalo que desaparece
Una tradición que peligra
O cualquier situación que ponga en riesgo la celebración…
Pero, como en toda buena Navidad, buscamos relatos que terminen con un toque de luz, ternura o sorpresa. No importa si tu historia es divertida, nostálgica, caótica o mágica, lo importante es que capture ese instante en el que parece que la Navidad no va a llegar… pero al final, de alguna manera, lo hace.
Cuando el horno dijo hasta aquí
El plan era sencillo, una cena perfecta, el horno funcionando como un campeón y yo, tranquila, disfrutando del espíritu navideño. Pero claro… eso era en mi cabeza.
A dos horas de la cena, el horno decidió morirse. Así, sin despedirse. Un clic, un olor raro y… silencio. Yo, atacada de los nervios, mirando el pavo crudo como si fuera a resucitar por arte de magia. La cocina parecía un campo de batalla y yo, la general derrotada.
—¿Y ahora qué hacemos? —pregunté, con ese tono dramático que solo uso de vez en cuando.
La respuesta fue tan simple como absurda" improvisar"
En diez minutos teníamos sobre la mesa un menú digno de un campamento Scott, huevos fritos, patatas, una ensalada que parecía pedir perdón por existir… y, eso sí, un gran pastel que por suerte ya estaba horneado desde la mañana. El único superviviente del desastre.
Y lo increíble es que, entre risas, bromas y brindis improvisados, la cena se volvió mágica. Nada salió como estaba previsto, pero todo salió mejor de lo que imaginé. Sin estrés, sin perfección, sin poses. Solo nosotros, juntos, riéndonos de la vida y de un horno traicionero.
Esa noche entendí algo, la Navidad no necesita grandes banquetes, solo grandes momentos.
Y aquella, la Navidad que casi no sucede, terminó siendo la más divertida de todas las que habíamos vivido… y de todas las que vendrán.
Campirela_
Aquí podéis ir a la convocatoria y participantes , muchas gracias.
Ficou linda e doce com uma bela mensagem!
ResponderEliminarÉ bem assim mesmo!
O Natal não precisa de muito para acontecer. Nós é que tudo complicamos,rs... Imaginei a cena e tiuve que rir...
Adorei o final feliz e que a magia aconteceu! LINDA!!!
beijos, FELIZ NATAL pra ti e teus,
chica
O Natal é verdadeiramente sobre a união das pessoas que amamos, família e amigos, partilhando o que todos os dias DEVERIAM ser, mas que, devido às circunstâncias da vida, não são possíveis, e este dia é para isso. A mensagem é que o que importa é a união, não o que se come ao jantar. Um grande beijinho e uma feliz segunda-feira para partilhar amor e amizade
EliminarCuriosamente, eso nos pasó, ya hace bastantes años, con toda la familia, la casa llena hasta la bandera, y a la hora de gratinar los canalones, el horno dijo que no.
ResponderEliminarHabía la opción de comerlos fríos, con el queso rallado y la mantequilla por encima sin fundir, pero no nos pareció más adecuado alargar el aperitivo, mientras salíamos un comando con las bandejas, en busca de un horno funcionando. Al final la cosa acabó bien. Una Navidad superada. :)
¡Feliz Navidad!
Qué bueno, no creas, esto es ficticio, pero podría ser tan real como la vida misma. A veces o muchas la realidad supera a la ficción con creces. Gracias, Alfred , por dejarnos tu anécdota.
EliminarLo importante es salir del apuro y pasarlo bien.
Un abrazo
Feliz Navidad!!
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