Relatos de los Jueves ( Esclavitud)

                             

                                                                 Imagen de la Red

Una tarde bien Empleada

 Estando en casa de mi amiga estudiando para  los exámenes finales ocurrió algo asombroso. Hicimos un descanso para merendar pues las letras nos dieron apetito, al bajar a la cocina su abuelo se encontraba preparándose una taza de chocolate bien caliente, muy amable nos dijo:

_ Jovencitas queréis que os prepare una buena merienda, Alicia contesto rápidamente, abuelo deja vete a sentar que ya nos lo preparamos nosotras.

_ El abuelo no pareció gustarle la contestación de su nieta  y este se volvió un poco ofuscado diciendo, ¡ya no sirve uno para nada!

_Alicia fue hacia él  le cobijo entre sus brazos, _ abuelo no te enfades, solo deseo que descanses que ya has trabajado lo tuyo_

El abuelo se echó a llorar dejándonos clavadas en el suelo, hasta que instintivamente ambas fuimos a consolar a ese hombre que había envejecido en dos segundos una eternidad. 

Sentados los tres en el sofá, el abuelo se puso a contarnos algo que llevaba en secreto, que le consumía por dentro, pues a nadie había contado su experiencia en la guerra civil de aquellos años desolados para todos los Españoles.

Su mayor dolor era haber visto como esclavizaban a los presos del otro bando, como los humillaban por ser de un linaje u otra creencia, eso le atormentaba cada noche al irse a dormir, sus pesadillas eran siempre las mismas, gritos, el ruido de las correas y los sollozos de los hombres bajo la batuta de otros hombres que por algún motivo se sentían superior  por llevar un  arma colgada a la espalda.

Nos contó, que él había leído sobre la esclavitud de los negros en los campos de algodón, pero que eso ya se abolió y ver que no se había aprendido nada en absoluto su frustración era inmensa, pues él hubiera querido sublevarse, pero no podía su  miedo era más fuerte que él.

_ Aquella tarde no volvimos a estudiar, la mejor lección nos la dio Félix, nos habló de las barbaridades que tuvo que aguantar,  nos enseñó que nunca bajemos la cabeza que luchemos por nuestros ideales con firmeza, pero sin pisar a nadie, ese es el lema "nadie es esclavo de nadie"

Campirela_